Los empresarios alemanes: "No miren a Alemania para el ritmo de reformas"

Walther Von Plettenberg, director gerente de la Cámara de Comercio Alemana para España, ha reconocido que las reformas que se están llevando a cabo en España llevan a cierto ahogamiento de la economía aunque dice, “en una situación así no hay otro remedio”, ya que no hay ingresos y las administraciones no se pueden endeudar más. No obstante, se ha mostrado optimista al señalar que “al final de este proceso doloroso, estaremos frente a una estructura saneada que estará llena de potenciales crecimientos”.

En este proceso de cambio, Plettenberg no anima a mirar al país germano: “no hay que aprender de Alemania en el ritmo de reformas ni pensar que lo que ha hecho nuestro país es suficiente”. Y es que, ha señalado que Alemania tiene el error de permanecer con un déficit público del 0,5% aun teniendo una economía que funciona razonablemente bien.Seguimos teniendo una estructura estatal excesivamente pesada, lo que demuestra que no hemos hecho los deberes”, asegura.

Plettenberg ha asegurado también que hay que “corregir la imagen excesivamente negativa de España respecto a su imagen exportadora”. Asegura que nuestro país está teniendo un superávit comercial respecto a la Unión Europea, y que quizá lo único que rompe esta balanza es la enorme importación de petróleo. Para ejemplificar el crecimiento de la capacidad exportadora de nuestro país, ha explicado cómo mientras Alemania ha disminuido sus exportaciones hacia España en un 30% desde el año 2007, al mismo tiempo España ha aumentado sus exportaciones.

Entre otra de las reformas, este alemán ha apostado por trasladar a España el modelo dual de formación: “aunque obviamente no solucionará el problema del paro juvenil, podría ayudar”. Entre las ventajas de este sistema, señala a que ayuda a que el joven decida pronto si se va hacia la Formación Profesional, una decisión que en España se toma a los 16 años y que en Alemania se inicia ya hacia los 10-12 años.

Y sobre el futuro de nuestro país, desde la Cámara de Comercio Alemana en España se muestran convencidos de que podría salir adelante sin el rescate:la pregunta es si es o no oportuno”, apunta Plettenberg. Así, añade que el Gobierno de Mariano Rajoy tiene que plantearse si está dispuesto a estar vigilado y condicionado por las directivas que vendrían desde Bruselas o si estima que ya ha hecho suficientes deberes. Además, señala que habría que hacer un estudio económico y estar pendiente a la actuación de los mercados: “si la prima de riesgo se dispara a niveles insostenibles, España no debe pagar un 7% de intereses de deuda. En este caso, no quedaría otra que pedir el rescate”.

Con todo ello, el director gerente de la Cámara de Comercio de Alemana reconoce que “los inversores alemanes siguen invirtiendo en España”. Unas inversiones que ya el año pasado superaron los 1.000 millones de euros. “La empresa no es tan huidiza como el capital de los mercados financieros. Una crisis de pocos años no hace que la situación cambie y la empresa se  replantee toda la inversión”, ha explicado.

Mirando a Europa

Con los ojos puestos en Europa, Plettenberg ha explicado que “una unión bancaria decidida y puesta en práctica en pocos meses, a los alemanes les parece bastante complicado”. Según explica, este supervisor necesitaría cientos de empleados formados para su tarea así como establecer mecanismos de información entre miles de bancos, algo que no es posible a corto plazo.

Además, aseguran desde esta Cámara de Comercio, Alemania teme que los sistemas financieros del resto de países europeos acabe perjudicando a Alemania y le haga perder el control. “El Gobierno germano tiene miedo a qué deudas y créditos esconden los demás países y a dejar los problemas en manos de un supervisor que desconoce y que no sabe cómo va a actuar”.

Así, más allá de una estrategia común exportadora en toda la Unión Europea, este germano ha apostado porque la economía real sea competitiva y sepa exportar. En este sentido, ha señalado cómo la Unión Europea ha hecho un buen papel al conseguir una balanza por cuenta corriente más o menos equilibrada lo que ayuda al euro. Concretamente, ha señalado, son tres países los que   consiguen un superávir muy importante de cara a países fuera de la unión europea: Austria, Holanda y Alemania. “Sin ellos, el euro se nos iría al traste”, ha remarcado.