La nacionalización de YPF, filial de la española Repsol, por parte del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner comienza a tener efectos colaterales "muy evidentes". Así lo ha asegurado Alberto Roldán, director de Análisis de Inverseguros en declaraciones a Gestiona Radio.

Entre las primeras empresas afectadas se encuentra Sacyr Vallehermoso,accionista de Repsol. La compañía presidida por Manuel Manrique tiene comprometida su participación en Repsol con los bancos. De hecho, hace poco se conseguía un acuerdo para renegociar la deuda. Tras la nueva situación de la petrolera, "pintan muy malas cartas para Sacyr", que vivirá una jornada "muy dura" en el mercado y cuyo "futuro es tan negro como el crudo de Repsol".

Roldán ha apuntado que el precio al que tiene contabilizada la inversión está muy por encima del precio de cotización y más aún antes  del descuento que teóricamente le va a aplicar hoy el mercado. Según el director de Análisis de Inverseguros, la única solución que van a pedir los bancos es que aporte más garantías pero "ignorar un préstamo que ahora parece prácticamente impagable es complicado".