Víctor Baeta, presidente de la Asociacion de Impositores Valencianos de la CAM, ha asegurado a Diario Financiero que sus abogados ya tienen prevista una demanda por “contratación irregular” de las cuotas. De este modo, se enquistaría un asunto que amenaza con poner en riesgo la operación pactada entre el Banco de España y la entidad catalana.
A juicio de Baeta “la variedad de formas en las que se han contratado es innumerable”. De hecho, según ha explicado, “muchos de ellos no sabían lo que compraban”. Asegura, además, que en la Asociación hay numerosos impositores que contrataron “por teléfono, sin que el cliente pasara por la oficina o, por ejemplo, sin que se les leyera la letra pequeña de lo que estaban firmando”.
Reconoce, eso sí, que “la ignorancia no puede eximirnos de la responsabilidad”. Sin embargo, estamos ante una situación novedosa provocada por unos productos que se colocaron como respuesta a “unas necesidades de capital impuestas por la Ley”. Algo a lo que, ha añadido, respondieron “los mejores clientes que ha tenido la Caja de Ahorros del Mediterráneo”, que han sido “quienes han ayudado durante todos estos años a recapitalizarse”. Sin embargo, Baeta no cree que haya existido fraude, sino “desconocimiento por todas las partes”.
Por eso reclama que se busque “una solución digna” a todos los impositores. Además considera que sería una buena medida para que Sabadell fidelice a sus clientes, ya que si no se produce duda mucho que se queden en la CAM en el futuro. Y para todo esto, Baeta pone un plazo: “antes de que termine la venta en el mes de marzo”, si para entonces no hay solución -advierte- “nosotros vamos a retirar los fondos, sin más historias”.