¿Impulso a la financiación? En el borrador presentado a principios de año, el apartado que más se esperaba recogiera medidas para ampliar los niveles de financiación son las Medidas para el fomento empresarial: Garrigues los resumía de la siguiente manera:
Medidas de fomento empresarial:
1. La modificación del reglamento de seguros privados para permitir invertir las provisiones técnicas en valores admitidos a negociación en el Mercado alternativo bursátil (MAB) u otro sistema multilateral de negociación que se concrete mediante Real Decreto, con determinados límites.
2. La modificación en el mismo sentido del reglamento de planes y fondos de pensiones para permitir las inversiones de los fondos de pensiones en el MAB.
3. La eliminación, para facilitar el acceso a la financiación no bancaria, del límite máximo de emisión (capital social desembolsado más reservas) para las obligaciones u otros valores que representen deuda, establecido en el artículo 405 LSC, cuando los valores se dirijan a (i) inversores cualificados; (ii) inversores que adquieran un importe mínimo de 100.000 euros o (iii) se trate de emisiones en las que el valor nominal unitario de los valores que se ofrecen sea de, al menos, 100.000 euros.
“En las facilidades de contratación, creo que puede tener un mayor impacto en la creación de nuevas iniciativas. Los costes laborales de seguridad social son tan altos y rígidos que dificualtan sobre manera la creación de empleo. Creemos que estas nuevas formas de contratación si van a convertirse en nuevas iniciativas, van a dar a los jóvenes con ganas de trabajar nuevas oportunidades”. “La principal dificualtad que nos encontramos con los proyectos en que estamos involucrados es la falta de profesionales preparados en disciplinas específicas, la formación debería ser menos generalista y más especializada, sobre todo en el sector de las nuevas tecnologías”, puntualiza Diego Gutierrez.