G-20 al rescate

 

No es para menos. Las 20 mayores potencias económicas quieren ver –como ha dicho el ministro inglés de finanzas- el color del dinero de Europa. Algo que, por ahora, no se ha visto nada más que en palabras y declaraciones. Además hay que sumar ese doble juego al que somete Alemania a la moneda única.

Por un lado, implementa con sus socios mecanismos de ayuda que impidan la el desmembramiento del Euro con la caía de Grecia pero, al mismo tiempo, reclama que se abran mecanismos que abran la puerta de salida.

Un doble juego que sólo hace una cosa: provocar desconfianza en sus socios, en los mercados y también en el resto de las economías mundiales. Hay disposición a ayudar a Europa a salir del bache, pero es necesario un ejercicio de responsabilidad política que no nos lleve a hundirnos todavía más en la recesión.