Al borde del precipicio fiscal

Tanto demócratas como republicanos tratan de buscar una alternativa que permita evitar esta situación, pero por ahora todos los acercamientos están resultando infructuosos. El último esta misma noche, cuando los republicanos han presentado un programa de recortes, que ha rechazado la Casa Blanca. Los republicanos apostaban  por un aumento de impuestos en 800.000 millones de dólares, mediante la supresión de exenciones y deducciones y un recorte de 600.000 millones en programas de seguridad social. Sin embargo, desde la oficina de Obama se quiere aumentar lo que ingresa el Estado en 1.6 billones de dólares, y el recorte en programas médicos debe alcanzar los 350.000 millones.

Escollos que están complicando la negociación, aunque el verdadero problema radica –una vez más- en una cuestión puramente ideológica. La Casa Blanca reclama aumentar los impuestos a los hogares con más de 250.000 dólares, mientras que los republicanos se oponen a adoptarla. Y ahí se va a a medir el juego de fuerzas entre las distintas fuerzas políticas, aunque finalmente –les guste o no- tendrán que ponerse de acuerdo para evitar un problema mayor en la economía del país.

Una situación que mantiene en vilo a los inversores internacionales, pero que debería ser la espoleta para el rallie alcista de fin de año en los mercados. Así que veremos cómo reaccionan hoy los mercados europeos. De momento en Asia lo que estamos viendo a esta hora de la mañana son tendencias mixtas en las principales plazas, después de que ayer el mercado americano cerrara con números rojos.