Una vez acordado el nuevo déficit de 2012 es ahora el tiempo de buscar de dónde recortar. El Congreso ha sido hoy una especie de brainstorming donde las ideas recaudatorias han venido por muchos frentes: el Gobierno ha negado que vaya a recortar el salario de los funcionarios para obtener esos 5000 millones de euros adicionales y tampoco se muestra partidario de subir el IVA al menos, este año, que luego, todo se andará. El partido socialista le propone subir los impuestos especiales, los del alcohol y tabaco, o también la recuperación del impuesto de patrimonio o un tipo de gravamen que castigue a las rentas más altas (curioso resulta cuando tuvieron ellos la opción). También disminuir el presupuesto de Defensa para no perjudicar otras partidas más necesarias como las de Educación o Sanidad. Las ideas de UpyD pasan por lo Feijó, fusionando pequeños municipios para recortar políticos, suprimir diputaciones y cerrar los que ha definido como "aeropuertos peatonales". Medidas todas ellas que merman el estado de las autonomias en pro del estado del bienestar. Hay alguna más que los técnicos de hacienda nos recordaban ayer: luchar contra el fraude fiscal, que permitiría obtener unos 20.000 millones de euros de ingresos extra y liquidar lo pendiente con los clubes de fútbol que deben más de 750 millones de euros. Aqui van ideas para esa tormenta. 1800 euros al mes se gasta cada diputado en dietas por alojamiento teniendo casa en Madrid. 100 millones de euros se gasta la Administración en alquileres teniendo nada más y nada menos que 55.000 edificios en Madrid. Sin olvidar los más de 3000 millones de euros que se calcula, el Estado destina a patronal, sindicatos y partidos políticos que podrían como en otros países, subvencionarse con las cuotas de sus afiliados. Hagan cuentas.