El Bundesbank critica al Banco Central Europeo por sumarse al carro de Estados Unidos y Japón de poner en marcha la máquina de hacer dinero. E insiste en un argumento que hasta ahora sólo se había sólo se había escuchado sotto voce y no tan claro: la falta de presión sobre las primas de riesgo de los países periféricos, les desincentiva para llevar a cabo las reformas económicas que son necesarias en estos momentos. Así que no parece que Alemania tenga intención de suavizar su postura, por mucho que los países del Sur se unan en su contra.
La guerra Norte – Sur en el seno del Consejo está servida, y mientras tanto aquí en España seguimos a vueltas con la manera de crear empleo para nuestros jóvenes. Rubalcaba se va a reunir esta semana con líderes empresariales, sindicales y europeos para exponer su propuesta, que contempla 60.000 millones en créditos del Banco Europeo de Inversiones a quienes creen puestos de trabajo para jóvenes.
Propuesta que va a plantear en Bruselas esta semana, con motivo de la reunión de Jefes de Estado y de Gobierno que arranca el miércoles. Ese día se van a intentar buscar puntos de acuerdo en la lucha contra el fraude fiscal, algo esencial pues los 27 pierden cada año cerca de un billón de euros de recaudación tributaria. Es decir, el equivalente al PIB español. Precisamente desde España, los inspectores de hacienda han puesto encima de la mesa una propuesta que, cuanto menos, va a resultar polémica- Incentivar a quienes se chiven de los defraudadores.
Veremos la acogida que tiene esta propuesta con algo que empieza a generalizarse en el ámbito político – económico de nuestro país. Que no es otra cosa que la de convertir al ciudadano en un chivato de lo que hace su vecino. Una práctica peligrosa que puede terminar dividiendo –e incluso- enfrentando a una sociedad por el temor a que el de al lado sea un comisariado que denuncie aquello que pueda estar haciendo mal.