Hoy el Gobierno tiene un examen importante. El defensor de la tesina será el ministro de Economía, Luis de Guindos, quien se va a Bruselas a hablar con sus colegas europeos para explicarles las cifras del déficit del año pasado. En concreto, cómo es posible que hayamos tenido un 8,3%, en lugar del 6% que habíamos comprometido. 

Sobre la mesa estarán los datos enviados por el Ejecutivo, y los recogidos durante la pasada semana por la delegación enviada por Eurostat para analizar las cuentas. Veremos si De Guindos se sabe bien la lección y es convincente, porque de sus palabras va a depender, en buena medida, el que Europa autorice la desviación del déficit anunciada para este 2012 en el cuadro macroeconómico.

Por cierto, un último apunte. Según el Banco de Pagos Internacionales, la exposición a la deuda de los países periféricos ha continuado cayendo en el tercer trimestre de 2011. En el caso de la exposición a España ha caído un 3.3% en ese período, fundamentalmente, en cuanto a deuda pública. No así a la privada, que se habría mantenido estable.