El Fondo Monetario Internacional sale en defensa y ayuda de España e Italia con un flotador que para nuestro país puede ser de 46,500 millones de Euros. El organismo que preside Christine Lagarde se erige en salvador y empieza a suplir -aunque de forma velada- las carencias de base que tiene la zona Euro y ejerce las funciones necesarias para poner la “bala de plata” que necesitan grandes economías europeas en problemas para empezar a salir del bache.
Importante ayuda la que podrá tener si la necesita el futuro gobierno de Mariano Rajoy que ayer se desayunaba con la subasta de bonos del tesoro a 3 y 6 meses. El resultado: más del 5% de interés y un aplanamiento cada vez mayor de la curva de tipos de España respecto al bono de 10 años. Esto implica, dicen los expertos, que empieza a descontarse un default a corto plazo de nuestro país. De ahí que el carácter gallego de Rajoy empiece a resultar desesperante para los mercados, que le reclaman que mueva ficha y ponga encima de la mesa su plan económico para los próximos años.