Grecia se salva in extremis

Y digo perdón porque se van a tomar medidas para reducir el endeudamiento público heleno un 20% de su PIB de aquí a en 2020. Para ello se van a ajustar los tipos de interés que se aplican a los préstamos, el BCE entregará una cantidad de dinero similar a la de los beneficios que obtendría de la cartera de deuda griega que posee, se van a extender los vencimientos y se abre la puerta a una posible opción de recompra de bonos por parte de Grecia.

 

Esta última opción todavía no se ha aceptado, si no que queda en estudio ya que aceptarla sería reconocer en la práctica que los países del Euro aceptan una quita cercana al 65%. Algo que, fundamentalmente Alemania, no están dispuestos a reconocer.

Estamos también en una jornada en la que el Tesoro va a seguir captando capital de cara al año que viene: 4.000 millones de euros espera captar en letras a 3 y 6 meses, que no debería presentar grandes problemas. Y llega el mismo día en el que hemos conocido que el Gobierno va a aumentar de cara al año que viene el FLA. El Fondo de Liquidez Autonómico para las Comunidades Autónomas, que en 2013 tendrá un saldo inicial de 23.000 millones, y podrá ampliarse si fuera necesario.

Nuevo capítulo en la financiación de las Autonomías que, de acogerse el año que viene a la medida, volverán a reconocer que siguen con su incapacidad de financiarse en mercados exteriores. De hecho, ahí está el gran problema de nuestra economía aunque nadie quiera verlo… Las Comunidades Autónomas que carecen de acceso a financiación exterior y que, como en el caso de Valencia o Murcia, son incapaces de cumplir con sus compromisos de pago. Ahí es donde hay que hacer el auténtico esfuerzo de reforma en nuestra economía, para conseguir reducir su endeudamiento, recuperar la confianza del inversor, evitar que se puedan producir quiebras que no se reconocen y, sobre todo, deben depurarse responsabilidades. Algo que en este país tenemos olvidado.