Bien, Linde, bien; pero tarde

Todo esto es a propósito del documento de la entidad, en el que los muchachos de Linde se mojan un poco más de lo habitual y le dicen al Gobierno que meta mano. Curiosos tiempos estos en los que a ex presidentes socialistas se les invitó a desregular el mercado, y a presidentes que se dicen liberales se les invite a intervenirlo, al menos en lo financiero. El Gobierno, como si me lo viera venir, replicará que antes de pasar a la acción conviene invitar a un café, a la cena o al cine. Cosas de mojigatos.

El único punto flaco del documento del Banco de España es que llega tarde. Bien, pero tarde. Primero, porque algunas entidades financieras ya están abriendo la mano. Y segundo, porque si se implementa lo que plantea, llegará tras la salida, gradual y con esfuerzo, de esta crisis. No me hagan aspavientos: mantengo que no hay brotes verdes y hasta 2018 no se creará empleo, pero al menos ya vamos montando de nuevo las piezas que se nos han derribado. Así que cuando lleguen estas propuestas, probablemente ya no hagan falta, o el daño actual ya sea irreparable.