Una escapada de fin de semana a esta encantadora posada es el plan ideal para desconectar de la ajetreada vida en la ciudad. La cocina lermeña y los vinos de la ribera del Duero y del Arlanza harán las delicias de todos los visitantes en un viaje por la gastronomía tradicional castellana que no decepcionará a quienes se animen a pasar unos días de descanso en la zona.
La Posada de Eufrasio, construida a partir de un negocio familiar dedicado a la restauración, une tradición y modernidad al ofrecer todo tipo de facilidades que van desde gimnasio, hasta acceso a internet, pasando por la sauna y un espectacular mirador.