Las redes sociales: Un gran potencial para la movilidad

Las redes sociales son un potencial para la movilidad, donde el ciudadano cobra protagonismo en la necesaria creación  modelo de un transporte sostenible. Se reúnen las facilidades para que la población pueda aportar información sobre el estado del tráfico, de la vía, incidencias, rutas, recomendaciones, etc. Para conseguirlo, los expertos recomiendan eficiencia para que la población pueda confiar en la información que se ofrece.

César Hinojosa, director de Tecnocarreteras.com, cree que hemos pasado de un paradigma de información estática a un nuevo modelo donde se busca la información dinámica: “saber cómo está el tráfico en cada momento en cualquier punto de la ciudad y poder integrar todos los mediso de transporte en la ecuación” aclara.

Las grandes ciudades han ido incorporando de forma paulatina sistemas de gestión de tráfico, por lo que ya tenemos tecnología disponible para gestionar de íntegramente la movilidad. El secreto para Alejandro Pérez Candela, responsable de la Plataforma de Gestión Inteligente de la Movilidad de Indra, está en la combinación del tráfico público y privado. A su juicio, teniendo en cuenta la seguridad y la fiabilidad, el objetivo que debemos marcarnos para conseguir ciudades sostenibles con servicios inteligentes es que la población utilice el transporte público para descongestionar el tráfico.

Una apuesta que comparte Hinojosa, quien considera que la intermodalidad puede ofrecer a los ciudadanos “los medios que le permitan elegir el transporte que se adapte a sus necesidades”.

Uno de los problemas a los que se enfrente la movilidad, además de la necesidad de un cambio cultural y de pensamiento, es la focalización del transporte público interno. Pérez Candela apuesta por “facilitar el acceso a la ciudad sin tener que utilizar el vehículo propio”.

El avance en este sentido, es para los expertos evidente, de hecho aseguran que ahora “las administraciones deben aprovechar los recursos y las infraestructuras ya disponibles” para, al seguir apostando por la tecnología y la innovación, se evite destinar grandes inversiones en momentos de crisis.

MALAGA, LA CIUDAD ELÉCTRICA

Un ejemplo de innovación y movilidad es Málaga, una ciudad trabaja para convertirse en Smart City y a tenor de los avances parece que lo está consiguiendo. De hecho, la pasada semana los príncipes inauguraban el Centro de Control Zem-2-All, un centro coordinado por el Ayuntamiento de la Ciudad y los Gobiernos de Japón y España para desarrollar un proyecto piloto de vehículos eléctricos. Con ello, la ciudad de Málaga se ha convertido en un laboratorio de pruebas real de lo que será el día de mañana una ciudad de coches eléctricos", asegura Mario Cortés Carballo, concejal delegado del Área de Innovación y Nuevas Tecnologías de consistorio.

Como ciudad, Málaga es pionera en la gestión del tráfico con la implementación de semáforos inteligentes que dan prioridad al transporte público y cámas que controlan el tráfico constantemente, entre otras medidas. Todo ello, porque se ha marcado como objetivo llegar a ser una ciudada sostenible. Se basa en tres pilares: "Dejar el combustible fósil para avanzar hacia el consumo eléctrico, paliar la contaminación acústica y reducir la emisión de gases", aclara Cortés.