La compañía finlandesa continua con su lucha para recuperar la hegemonía del sector y estos dos nuevos terminales pueden ser un buen intento. Nokia dejaba de ser el vendedor líder del mercado, tras catorce años al frente del sector, debido al gran avance de Samsung y sus atractivos smartphones. Ahora, la multinacional afronta los próximos meses con el objetivo de mejorar las prestaciones, y como consecuencia la popularidad, de sus teléfonos inteligentes. Tras esta presentación, dos lanzamientos de una tacada, parece que van por la senda adecuada, aunque seguramente no sea la definitiva.
El Lumia 610 se corresponde al utilitario de cualquiera gran marca de automóviles. En época de crisis, Nokia saca al mercado un smartphone con una relación calidad-precio muy interesante. Un teléfono que reúne las características esenciales que le pedimos a todo buen smartphone, y además un diseño llamativo, disponible en cuatro colores. No le podemos pedir espectaculares aplicaciones, a última hora se conocía que no incorpora Skype, pero sí características funcionales y correctas. Cámara de cinco megapíxeles y pantalla de 3,7 pulgadas con resolución de 800 × 480 píxeles. Todo esto, con un precio libre de 229 euros, lo que hace presagiar que aparecerá en el mercado con las tentativas ofertas “free” de las compañías.
El plato fuerte llega de la mano del Lumia 900. La multinacional finlandesa ha volcado todos sus recientes esfuerzos en elaborar un smartphone potente, y a primera vista, con su espectacular diseño, lo han conseguido. Pero cuando entramos e indagamos en sus prestaciones, un sinsabor es la palabra idónea para describir nuestras sensaciones. Su diseño es espectacular y, sin duda, es su máximo valedor. Una apariencia que se desmarca de la sobriedad de sus grandes competidores, bordes redondeados y una parte trasera en color azul eléctrico que engancha. Su pantalla tiene luces y sombras. Por una parte, una dimensión adecuada de 4,3 pulgadas. Pero por otra parte, la resolución de 800 x 480 píxeles se queda corta para una pantalla tan grande. Cámara, de 8 megapíxeles, adecuada a las tendencias del sector. Sin embargo, sólo graba vídeo HD en una calidad de 720p, mientras que sus competidores ya lo hacen en 1080p.
Además, la compañía ha sorprendido con la primicia de un nuevo modelo revolucionario, el Nokia 808 PureView. Un móvil que incorpora una increíble óptica Carl Zeiss de alto rendimiento y un sensor de alta resolución con 41 megapíxeles. Con todo ello, Nokia da un paso adelante para recuperar el ansiado liderazgo, ya que cubre un importante segmento del mercado con su Lumia 610. Además, lanza un alto de gama (Lumia 900) que puede atraer a un importante número de usuarios, aunque se queda corto para luchar cara a cara y sin complejos con el Galaxy SIII y el iphone 4S.