el presidente de EEUU, Barack Obama, ha presentado un plan que contempla invertir más de 300.000 millones de dólares en infraestructuras en los próximos cuatro años, durante su visita una estación de trenes y autobuses en St. Paul (Minesotta).
El plan busca mejorar los puentes, carreteras y el sistema de transporte del país, y propone que la mitad de ese dinero se consiga con una revisión del impuesto de sociedades. Eso sí, Obama dice que está abierto a discutir otras formas de financiación con el Congreso. El mandatario aboga además por construir sistemas de transporte más resistentes e inteligentes, que puedan mantenerse ante los peores impactos del cambio climático. También ha anunciado la convocatoria a un concurso que va a otorgar 600 millones de dólares en subsidios federales a financiar proyectos de infraestructura que generen nuevos empleos.