El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, subrayó este miércoles que todas las previsiones de la Comisión Europea, OCDE y FMI muestran que España va a seguir «creciendo fuerte» y «liderando» la expansión en el área euro y el conjunto de Europa, pasando de puntillas por los reparos puestos por los organismos al proyecto de Presupuestos de 2019.
A juicio de Sánchez, los tres ejes más importante de los informes divulgados hoy por los tres organismos es que el país seguirá reduciendo el paro y disminuyendo el déficit hasta, «por fin salir», lograr salir del brazo corrector de la Unión Europea al situar dicho baremo por debajo del criterio de Maastricht del 3% este mismo año.
Sánchez realizó esta valoración en la rueda de prensa convocada para rendir cuentas sobre los acuerdos alcanzados durante la ‘XXX Cumbre Hispano-Portuguesa’ celebrada en Valladolid, sin entrar a valorar, aún a preguntas directas, las enmiendas de los organismos a las cuentas presentadas.
El veredicto que se esperaba con mayor interés es el de la Comisión Europea, que ha considerado que el Plan Presupuestario presentado por España para el año 2019 corre el riesgo de incumplir las exigencias del Pacto de Estabilidad y Crecimiento.
Su conclusión se basa en las previsiones económicas de otoño de 2018, que indican una desviación significativa de la senda de ajuste exigida hacia el objetivo presupuestario a medio plazo y el incumplimiento del valor de referencia transitorio para la reducción de la deuda en 2019.
Pero la mayor enmienda la ha planteado el Fondo Monetario Internacional (FMI) que demanda al Gobierno un ambicioso plan de reformas en el ámbito laboral, de pensiones y fiscal para reforzar y apuntalar el crecimiento después de haber reducido su previsión de expansión de PIB este año del 2,7 al 2,5%.
Entre otros aspectos, el organismo liderado por Christine Lagarde valora el ritmo de contención del déficit pero reclama un mayor esfuerzo porque «gran parte de la reducción conseguida» se origina por efecto del fuerte ciclo económico y las bajas tasas de interés.
Por su parte la OCDE rebajó el crecimiento previsto para este ejercicio desde el 2,8 al 2,6%; en línea con la proyección del Gobierno; y del 2,4 al 2,2% para el próximo ejercicio, ligeramente inferior al 2,3% de estimación oficial.
Los expertos de la OCDE dudan igualmente de la capacidad para reducir el déficit y han reducido su previsión para el país al 2,7% del PIB este año y al 1,8%, que si bien están en línea con los objetivos del Gobierno se alejan del 2,4% que esperaba en su estudio de mayo para 2018.