Bolinaga ya no podrá seguir paseando por Mondragón, estará obligado a permanecer en su casa y sólo podrá salir para recibir los tratamientos médicos que precisa el cáncer terminal que padece.

Es el fallo del juez Moreno, que considera al etarra culpable del asesinato del guardia civil, Antonio Ramos, un homicidio en el que también participaron José Luis Erostegi y Javier Ugarte, condenados ambos a prisión incondicional.

Uribetxebarria Bolinaga llegaba a última hora de la tarde a declarar al juzgado de Vergara dónde ha escuchado la sentencia.

El etarra permanecía en libertad condicional desde octubre de 2012, después de que el juez de vigilancia penitenciaria, José Luis Castro, aceptara a los informes médicos que le daban – en un 90% – una esperanza de vida de tan sólo un año.