El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha asegurado este miércoles que la reforma fiscal que ha aprobado el Gobierno será «muy útil» para mejorar el nivel de vida de los españoles, ya que tiene tres objetivos prioritarios: ayudar al crecimiento económico, promover la creación de empleo y crear un sistema fiscal más equitativo.

Durante la sesión de control al Gobierno y en su segundo ‘rifirrafe’ con el nuevo secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, el jefe del Ejecutivo defendió su reforma fiscal y rechazó las críticas del líder socialista, quien aseguró que con la nueva reforma fiscal el 10% de las rentas más altas se van a beneficiar del 60% de la rebaja.

Rajoy le contestó que ésa no es la reforma fiscal del Gobierno del PP sino la del PSOE, ya que durante la pasada legislatura algunas de las grandes sociedades que cotizan en el Ibex 35 tenían «un tipo real del cero por ciento», mientras que la nueva reforma fiscal rebaja el IRPF al 100% de los contribuyentes, con un descenso medio del 12,5%, que se eleva al 23,5% para el 72% de los contribuyentes con menos rentas.

«Quienes más van a pagar son las rentas altas», aseguró Rajoy, quien también resaltó que los mínimos familiares se elevan un 32% y se crean nuevas ayudas para las familias. «La mayor desigualdad fue cuando hubo un Gobierno que con sus políticas generó 3,4 millones de pérdidas de puestos de trabajo, eso sí que es generar desigualdad», indicó.

El jefe del Ejecutivo también reprochó a Sánchez que las políticas económicas del Gobierno del PSOE provocaron la pérdida de recaudación de más de 70.000 millones de euros y le recordó que cuando el PP llegó al Ejecutivo las tasas de pobreza estaban en niveles «récord», mientras que ahora están bajando.

El líder del PSOE acusó a Rajoy de gobernar para las «élites», únicamente para el 10% de los españoles, mientras se rescatan bancos que luego se «malvenden» y se producen 39.000 desahucios al año. Así, dijo que los «sacrificios» siempre los hacen los mismos. «Quite la mano del cuello de la clase media y trabajadora porque aprieta muy fuerte y tiene que dejarla de respirar para que España avance», le espetó.

Además, Sánchez dijo a Rajoy que había «defraudado a los españoles» prometiéndoles una rebaja de impuestos, después de haberlos subido «50 veces», así como de luchar contra el fraude fiscal y aprobar después una «inmoral» amnistía fiscal, «a la que se ha acogido un viejo amigo suyo», en alusión al extesorero del PP Luis Bárcenas, ahora en prisión, según le recordó el secretario general del PSOE.

«No me hable de fraude fiscal porque en 2012 y 2013, ya con el PP en el Gobierno, fueron los años en los que más se recaudó como consecuencia de la lucha contra el fraude fiscal, mucho más que cuando ustedes estaban en el Gobierno», se defendió Rajoy.