El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, prometió este jueves que la legislatura actual acabará con «menos personas en paro» que las que había a finales de 2011, cuando el Partido Popular ganó las elecciones generales y tomó posesión al frente del Palacio de la Moncloa.
Rajoy adquirió este compromiso en Barcelona durante su participación en la clausura de la Asamblea del Foro de Marcas Renombradas Españolas, donde horas antes había intervenido el presidente de Cataluña, Artur Mas. Sin embargo, los dos mandatarios ni siquiera coincidieron porque el dirigente autonómico se marchó antes de que llegara el jefe del Ejecutivo central. «Este año se va a crear empleo estable y al año que viene más, y al final del año que viene España tendrá menos personas en paro que al final de 2011″, proclamó en alusión a los 4.422.359 españoles que estaban registrados en el INEM en diciembre de aquel año.
Según los datos oficiales de marzo de 2014, en España hay actualmente 4.795.866 personas que buscan empleo y no lo encuentran. Por eso, Rajoy sentenció en su discurso que su prioridad política sigue siendo mejorar la situación económica y crear puestos de trabajo.»Resulta evidente que el trabajo aún no está terminado. No puede estar terminado mientras en España haya cinco millones de personas que quieren trabajar y no pueden», dijo. «Hay que sentar las bases para un crecimiento sostenido y de generación de empleo».
En este contexto, Rajoy señaló que el objetivo del Gobierno es «crecer y crear empleo». Garantizó que España crecerá «por encima del 1%» este ejercicio después de haber acabado con la recesión en 2013. Pronosticó que «en 2014 España va a crecer por encima del 1% y en 2015 vamos a crecer claramente por encima del 1,5%».
En materia de empleo, agregó, «se va a crear empleo estable y al año que viene más». Rajoy proclamó en este punto que al final del año que viene, cuando está previsto que se celebran las elecciones generales, España «tendrá menos personas en paro que al final de 2011», cuando llegó al poder.
BUENAS NOTICIAS
El jefe del Ejecutivo manifestó que «las buenas noticias sobre la economía española comienzan a ser cada más frecuentes». «¡Ya era hora!», exclamó después de dos años y medio en los que ha tenido que aprobar importantes recortes para ajustar las cuentas públicas.
Rajoy confió en «batir los pronósticos» económicos del propio Gobierno, tal y como ha sucedido en la primera mitad de su mandato, y se comprometió a «seguir trabajando para afianzar la recuperacion».
A su juicio, existe un «cambio trascendental» sobre la visión exterior de la economía y las empresas españolas, como prueba el hecho de que las exportaciones hayan crecido un 4%, hasta alcanzar «un nuevo máximo histórico desde 1971».
Rajoy señaló que en el sector turístico «seguimos siendo fuertes», con 59.082 millones de euros gastados en España por extranjeros y con un récord de más de 60 millones de visitantes.
El presidente se mostró orgulloso de que España ahora transmite credibilidad fuera de las fronteras y, en medio de la controversia política por el desafío independentista de la Generalitat de Cataluña, avisó que «el país en su conjunto debe lanzar una imagen de seriedad y profesionalidad en su conjunto».
Gracias a ello, incidió, «se están reconocimiento los esfuerzos realizados» y desde otros países «se han aplaudido las reformas acometidas» en la primera mitad de la legislatura. Sacó a relucir que la prima de riesgo se ha reducido a una cuarta parte de lo que llegó a alcanzar en el verano de 2012 y elogió el valor que aportan las marcas españolas, a las que definió como «la punta de lanza del tejido empresarial».