La Autoridad de Mercados y Competencia del Reino Unido (CMA) ha abierto una investigación para determinar si Apple cuenta, a través de la App Store, con una posición dominante en el mercado de aplicaciones para sus dispositivos y, de ser así, si impone términos y condiciones injustos y contrarios a la competencia a los desarrolladores que usan la tienda de apps de la compañía.
En este sentido, el regulador ha subrayado que se trata solo del comienzo de la investigación y aún no se ha tomado una decisión sobre si Apple está infringiendo la ley.
La apertura de esta investigación ha sido impulsada por el propio trabajo de la CMA sobre el sector digital, así como por las quejas de varios desarrolladores que informaron de que los términos y condiciones de Apple son injustos y podrían infringir la ley de competencia, ha indicado el regulador británico, destacando que Apple no solo diseña, fabrica y comercializa los dispositivos, sino que gestiona la App Store, la única forma de distribuir aplicaciones de terceros en los iPhone y iPad de Apple, y la única manera de que los clientes de Apple accedan a ellas.
En este sentido, la CMA ha señalado que todas las aplicaciones disponibles a través de la App Store deben ser aprobadas por Apple, y esta aprobación depende de que los desarrolladores acepten ciertos términos, señalando las quejas por parte de los desarrolladores de la obligación exclusiva de distribuir sus aplicaciones para iPhone y iPad a través de la App Store.
Asimismo, ha apuntado también las quejas de ciertos desarrolladores que ofrecen funciones, complementos o actualizaciones «en la aplicación» sobre la necesidad de utilizar el sistema de pago de Apple, en lugar de un sistema alternativo, puesto que Apple cobra una comisión de hasta el 30% a los desarrolladores sobre el valor de estas transacciones o cada vez que un consumidor compra su aplicación.
De este modo, la investigación de la CMA considerará «si Apple tiene una posición dominante en relación con la distribución de aplicaciones en dispositivos Apple en el Reino Unido y, de ser así, si Apple impone condiciones injustas o anticompetitivas a los desarrolladores que utilizan la App Store», dando como resultado en última instancia para los usuarios disponer de menos opciones o pagar precios más altos.
«Nuestro examen permanente de los mercados digitales ya ha detectado algunas tendencias preocupantes. Sabemos que las empresas, así como los consumidores, pueden sufrir daños reales si las prácticas anticompetitivas de las grandes tecnológicas no se controlan», ha afirmado Andrea Coscelli, consejero delegado de CMA.
Competencia del Reino Unido ha recordado que la Comisión Europea (CE) tiene abiertas actualmente cuatro investigaciones antimonopolio sobre Apple, que se lanzaron antes del final del Período de Transición del Reino Unido, incluyendo tres investigaciones sobre la App Store, y ha subrayado que continúa coordinándose estrechamente con la CE, así como con otras agencias, para abordar estas preocupaciones globales.