El consejo de administración de Renfe ha aprobado una propuesta preliminar para revisar de forma excepcional los precios de los contratos públicos encargados desde 2019 para la fabricación y el mantenimiento de trenes de Cercanías, Rodalies y Media Distancia, adjudicados a CAF, Alstom y Stadler.
Renfe justifica que estos contratos se vieron afectados por la situación de crisis derivada de la pandemia de la Covid-19 y por la guerra de Ucrania, situaciones que impactaron significativamente en el precio de las materias primas y, por tanto, en un aumento de los costes para las empresas fabricantes.
Como consecuencia de estas situaciones excepcionales, el Gobierno ya aprobó una disposición adicional segunda a la Ley 26/2022 para iniciar un proceso de revisión de precios a estos contratos de trenes de servicios públicos (Cercanías, Rodalies y Media Distancia).
Tras ello, Renfe encargó a la ingeniería pública Ineco un estudio para establecer el impacto de las dos crisis en los precios de los componentes y de las materias primas utilizadas por los fabricantes de estos trenes, las empresas Alstom, Stadler y CAF, ubicadas las tres en diferentes instalaciones en España.
El análisis realizado por Ineco determina el incremento de precios producido en cada uno de los componentes y materiales utilizados en el proceso de fabricación (acero, aluminio, cobre, plásticos, químicos, vidrio o material electrónico, por ejemplo) y aplica un efecto corrector, en función del gasto realizado en cada serie de trenes y por cada uno de los fabricantes.
ENCARGOS AFECTADOS
En el caso de CAF afecta a la fabricación de 31 trenes de ancho métrico, 6 trenes ‘alpinos’, 28 trenes eléctricos de media distancia, 29 trenes eléctricos de Cercanías y las opciones posteriores ejercidas.
En el caso de Alstom, a la fabricación de 152 trenes de gran capacidad de Cercanías y sus opciones y, para Stadler, a 24 trenes de gran capacidad de Cercanías (en su versión de 100 metros de longitud) y 35 trenes de gran capacidad (en su versión de 200 metros de longitud), con sus posteriores opciones.
Además, la propuesta preliminar de Ineco plantea la revisión de los contratos para la adquisición de piezas de parque que permitirán el mantenimiento futuro de estos trenes.
Ahora, Renfe enviará el informe a los fabricantes de trenes, que dispondrán de 20 días para presentar alegaciones. Posteriormente, la propuesta será remitida a la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos (Ministerio de Economía, Comercio y Empresa) y al Consejo de Ministros para su aprobación definitiva.