Ricardo Sixto: “El futuro del proyecto Castor es bastante negro”

Hemos conocido el informe del Instituto Geográfico Nacional (IGN) sobre la actividad sísmica en el entorno del proyecto Castor que concluye que existe una “relación directa” entre los 450 seísmos que se produjeron en septiembre de 2013 en el litoral de Castellón y la inyección de gas. A este informe ha tenido acceso el diputado de IU en el Congreso, Ricardo Sixto, tras una petición de información al Congreso sobre este asunto. Nos lo ha contado en Gestiona Radio.

– ¿Qué le parece que dicho informe concluya ahora que “hay relación directa” entre los seísmos y el proyecto de gas Castor?

Ahora lo dicen especialistas pero era una conclusión fácil de obtener por cualquier persona. Cuando se deja de inyectar gas y se paraliza el tema acaban paralizándose los terremotos. El informe pone de relieve que falta mucha más información porque los epicentros de los terremotos no estaba en la falla de Amposta que era la conocida, sino en otra. Ofrece nuevos “porqués” de lo que ha sucedido pero no cierra todas las vías de investigación de cómo se mueve el terreno sobre la zona.

– ¿Y ahora cuál va a ser el futuro del proyecto Castor?

Lo vemos bastante negro. Primero porque va a ser muy complicado que nadie ponga la mano en el fuego de que ahí no va a pasar nada si se sigue con la explotación de gas. Desde Izquierda Unida siempre hemos defendido que no se hiciese ese proyecto de almacén submarino de gas y lamentamos que el tiempo acabe dándonos la razón.

– ¿Existe riesgo de que un posible cierre nos cueste dinero a los ciudadanos?

Si, un riesgo grave. El anterior gobierno el del Partido Socialista, estableció que si no llegaba a utilizarse o si el Gobierno declinaba su explotación, la empresa constructora vería amortizada su inversión allí. Es una cosa complicada, porque si el Gobierno decide que por los riesgos que eso conlleva no se va a explotar ese almacén submarino de gas, habría que indemnizar a la empresa que lo ha construido con una cantidad multimillonaria, que podría ascender a los 1.700 millones que es el coste calculado que ha tenido la inversión.