Lo dijo durante su intervención ante el Pleno del Senado para informar de las líneas generales de la actuación del Gobierno, en la que comentó que la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado es fundamental para canalizar los alrededor de 140.000 millones de euros que España recibirá del fondo de recuperación económica de la UE en los próximos seis años, de los que 72.700 millones serán en ayudas directas y el resto en créditos.

Sánchez comparó esta cifra -140.000 millones- con la que España ha recibido procedente de los Fondos Estructurales de la UE -8.000 millones- para poner de manifiesto la gran oportunidad que el país tiene ante sí para modernizar su economía y sentar las bases de su desarrollo para los próximos años.

El jefe del Ejecutivo expuso que hasta el momento todos los actores concernidos han hecho su papel: la Comisión Europea, el Banco Central Europeo (BCE), el Consejo y el conjunto de los 27 Estados miembros “mutualizando unos riesgos” que hasta hace poco tiempo era impensable que pudieran ser aceptados.

“Ahora es el turno de cada uno de los Estados miembros”, proclamó Sánchez, a través de la aprobación de unas cuentas “progresistas” y “de país”, que estén concebidas “por y para los ciudadanos”, “por y para las comunidades”, “por y para los ayuntamientos”.

Esto le sirvió para dejar claro que el Gobierno centrará sus esfuerzos en alcanzar el “acuerdo parlamentario más amplio posible” para forjar esos PGE “progresistas y de país” que anhela aprobar.

El presidente del Gobierno comentó que, si los grupos reclaman la prórroga de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), es razonable que se comprometan con la aprobación de unos Presupuestos que proporcionen “cobertura financiera” a ese mecanismo.

Desde su punto de vista, la urgencia de aprobar unas nuevas cuentas públicas es mayor si cabe si se atiende a que España se rige por unas cuentas aprobadas en 2018 durante el Gobierno de Mariano Rajoy, “que son peor que inservibles, porque están diseñado para una situación completamente distinta de la actual”.

Por último, no dejó pasar la oportunidad de arremeter contra el PP, sin mencionarle, por su negativa a apoyar la aprobación de unos PGE. Lo hizo recordando que aquellos que “se definen como constitucionalistas y partidos de Estado” deben “romper el bloqueo” y sumarse al “acuerdo abrumador” que dijo que existe entre la sociedad para auspiciar unas nuevas cuentas públicas.

No apoyar los presupuestos, concluyó Sánchez, “no es un bloqueo al Gobierno, sino a nuestro país, y eso es inaceptable”.