Santander Wealth Management & Insurance estima que en 2021 se consolidará la recuperación iniciada en el tercer trimestre de este año por las economías globales y prevé un incremento del PIB español del 5,1% en 2021.
Es un incremento mayor que el que prevé para el conjunto de la zona euro, que asciende al 4,6%. Igualmente, prevé para el próximo año aumentos del PIB del 4,2% para Estados Unidos y de hasta el 8,4% para la economía china.
En su ‘Informe de Perspectivas de Mercados 2021 titulado Recuperación y Disrupción’, la entidad que aglutina el negocio de banca privada, gestión de activos y seguros apunta que, para que esta recuperación económica se consolide, es necesario el alargamiento de los estímulos monetarios y fiscales, el mantenimiento de las medidas de distanciamiento social y, sobre todo, la vacunación masiva de la población.
El responsable global de Santander Wealth Management & Insurance, Víctor Matarranz, ha apuntado que el entorno de recuperación y disrupción requiere un enfoque dinámico para lograr rendimientos superiores a la inflación. «En un entorno en el que los tipos de interés son extremadamente bajos y seguirán siéndolo durante mucho tiempo, sigue intacta la necesidad de considerar en alguna medida inversiones más arriesgadas con rendimientos positivos», ha apuntado.
Entre los riesgos, el informe destaca que, una vez que la amenaza de la pandemia desaparezca y la actividad económica se estabilice, se produzca un sobrecalentamiento provocado por los programas de estímulos y que derive en altas tasas de inflación en un futuro.
«Este, desde nuestro punto de vista, es un riesgo a considerar, pero con una baja probabilidad de que se convierta en un caballo desbocado. En definitiva, nuestro escenario base contempla un repunte moderado y poco preocupante de los precios y un mantenimiento de los bajos tipos de interés por un periodo prolongado», indica Matarranz.
RECOMENDACIONES
Santander Wealth Management & Insurance recomienda que los inversores busquen alternativas en soluciones de inversión que incorporen nuevas formas de gestionar sus activos, ante la falta de rentabilidad potencial en los tradicionales activos de bajo riesgo y la ausencia de tipos de interés atractivos.
En este sentido, aconseja tomar posiciones en renta variable en los dos extremos del espectro de crecimiento de beneficios, manteniendo una exposición a los valores favorecidos por las nuevas tendencias de futuro, pero rotando desde los sectores que han registrado mayor revalorización en 2020 hacia sectores y temáticas menos exploradas.
Asimismo, recomienda incrementar progresivamente la exposición a los sectores más golpeados durante la pandemia para beneficiarse de su mayor apalancamiento al escenario de recuperación y la vuelta a la normalidad. «Las Bolsas europeas y latinoamericanas podrían verse favorecidas al haberse quedado rezagadas en los primeros compases de la recuperación económica por su alto sesgo cíclico», señala el informe.