Seat prevé cerrar este año con 350.000 coches fabricados en Martorell (Barcelona), lo que supone un 30% menos que en 2019 debido al impacto de la pandemia, que obligó a cerrar la fábrica durante seis semanas en marzo y abril y a reducir el volumen de producción durante el segundo trimestre.
Fuentes de la compañía han explicado este lunes que para el año que viene la automovilística tiene previsto fabricar 483.000 coches en la planta de Martorell, lo que supone un 38% más que este año.
Este crecimiento de la producción, que permitiría a la marca una de las cifras más altas de su historia, vendrá impulsada por la nueva familia del León y el Cupra Formentor, con versiones híbridas eléctricas enchufables.
Este mismo lunes la dirección de la automovilística y los sindicatos han acordado el calendario laboral para 2021, que contará con 224 de días de trabajo a un ritmo de alrededor de 2.200 coches al día, el mismo volumen que tenía antes de la pandemia.
La compañía aplicó a inicios de noviembre el teletrabajo en los puestos cuyas características lo permitan, y lo amplió hasta el 23 de diciembre, con el objetivo de reducir la movilidad de las personas para ayudar a contener los contagios mientras dure el actual repunte de la pandemia de coronavirus.