La organización Save the Children se mostró este viernes a favor de la apertura de comedores escolares durante el verano para atender a niños en riesgo de exclusión, tal y como solicitó la defensora del Pueblo, Soledad Becerril.
En nota de prensa, la ONG expresó su preocupación por el bienestar de los más de 2.800.000 niños y niñas en riesgo de pobreza o exclusión social, ante la «escasa acogida de esta propuesta que han mostrado muchas comunidades autónomas».
Según explicó, «el período estival supone un factor de riesgo añadido para la infancia necesitada», y de ahí su apoyo a la apertura de los comedores oportunos, siempre en función de las necesidades de cada territorio.
«Esta debe ser no obstante una medida puntual», destacó, a la espera de que las administraciones central y autonómicas adopten medidas más ambiciosas para abordar una solución integral.
Entre estas, Save the Children recomendó elaborar un estudio sobre el impacto de la malnutrición infantil en España; poner en marcha un programa de detección de problemas de alimentación en los colegios y centros de salud; prestar mayor atención a las franjas de edad donde es más difícil detectar los casos de malnutrición, como la educación preescolar o la secundaria, y encargar un plan específico contra la pobreza infantil.
La organización recomendó, finalmente, que el funcionamiento de estos comedores se integre dentro de una acción educativa y lúdica más general, donde su servicio «sea un componente más».