El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, defendió este jueves el «necesario» y «oportuno» proyecto de ley de modificación de la Ley de Hidrocarburos y planteó a la oposición que presente enmiendas para limitar el porcentaje de participación en el mercado de carburantes, actualmente en el 30%, y facilitar la apertura de más estaciones de servicio.

Así lo señaló Soria durante su intervención en la Cámara Baja para defender dicho proyecto, en el que instó a los grupos parlamentarios a que planteen enmiendas parciales a la normativa para mejorar también la información relativa al volumen de ventas, a los precios o al origen del combustible.

Soria aseveró que serán «más que bienvenidas» este tipo de propuestas, como la de aumentar el número de estaciones, algo «bueno para los consumidores» al tener una traslación en los precios. De esta forma, pidió a los grupos que han presentado enmiendas a la totalidad al proyecto (grupo parlamentario socialista, IU, BNG y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC)) que las retiren ante la necesidad del mismo.

El ministro subrayó que el sector de hidrocarburos presenta «importantes fortalezas» al contar con una red de gas natural desarrollada en todo el país e infraestructuras gasistas que «suponen una oportunidad para que España sea el centro logístico de gas natural para toda Europa». En este sentido, Soria sostuvo que España, con los almacenamientos subterráneos, las regasificadoras y los gaseoductos existentes, y si hubiese interconexiones «suficientes», estaría en condiciones de poder suministrar al resto de Europa hasta un 50% del gas ruso que llega al resto del continente desde Ucrania.

Entre los objetivos de la reforma de la Ley de Hidrocarburos citó el aumentar el grado de competencia y transparencia en la formación de precios a través de la creación de un mercado secundario organizado de gas natural. Asimismo, busca conjugar el fomento de actividades de explotación y exploración de hidrocarburos con una compensación a los ciudadanos y las administraciones públicas por el posible efecto derivado de «potenciales externalidades negativas».

A su vez, garantizará una mayor protección al consumidor imponiendo obligaciones de suministro a comercializadoras; reducirá los costes para los consumidores mediante la liberalización de inspecciones de instalaciones de gas y adaptará el régimen de sanciones.

Nuevas medidas

El titular de Industria detalló que el proyecto de ley contemplará nuevas medidas tributarias y no tributarias, entre las que se encuentran la creación de un impuesto sobre el valor de extracción del gas, petróleo y condensado, sobre el valor de producción con tipos impositivos que se fijarán en función del nivel de producción, de forma progresiva.

También se modificará el canon de superficie existente y se introducirán dos nuevas escalas por perforación de sondeos y adquisición de datos sísmicos, al tiempo que se fijará el pago a los propietarios de un 1% del valor de la producción de un emplazamiento.

Además, se posibilitará que cualquier instalador de gas natural habilitado pueda realizar inspecciones de las instalaciones, y se fomentará la entrada de fomenta entrada nuevos comercializadores mediante el reconocimiento mutuo de licencias para comercializar gas natural con países que se establezca acuerdo previo.

El proyecto de ley establecerá medidas en relación a las existencias mínimas de seguridad «sin menoscabar la seguridad de suministro, y permite dotar a comercializadores de mayor flexibilidad y menor coste», y en él se distingue entre reservas estratégicas, que deben ser almacenadas por Cores, y reservas operativas, que serán almacenadas por operadores que actúan en el mercado.

Servimedia

Foto: GTRES