El 29 por ciento de las contrataciones se producen a tiempo completo
«Vigor y fuerza» en el ritmo de crecimiento de las empresas y del empleo. Esa ha sido la idea que la ministra de Empleo Fátima Bañez ha transmitido con respecto a la evolución del mercado laboral, y que a tenor de los datos de afiliación y paro que se han publicado esta misma mañana consolidan la realidad de una «reforma silenciosa».
Del 1.445.775 contratos que se firmaron durante el mes de marzo tres de cada cuatro fueron indefinidos, lo que traducido a cifras concretas representa un total de 144.291. Absoluto del que además se extrae otro dato positivo y es que el casi el 29 por ciento de los mismos (41.555) se registraron a tiempo completo. Si atendemos a los más de 16,8 millones de afiliados a la seguridad social, el 76 por ciento de ocupados cuentan con un contrato de trabajo sin fecha de término, «mientras que en 2011 era tan sólo del 74 por ciento». Una puntualización que la Ministra acompañaba del dato relativo al «10 por ciento de flujo de contratos indefinidos al mes», también dos décimas superior al de 2011.
Fatima Bañez, que inauguraba hoy el Ágora del Empleo organizada por el diario El Economista en colaboración con Gestion Press, ha insistido en la importancia de la «reforma estructural» que su negociado desarrolla desde que se inició la legislatura. Una reforma que ha permitido la puesta en marcha de medidas como la Tarifa Plana a la Contratación Indefinida que «ya ha generado 231.000 contratos indefinidos». Bañez, también ha querido destacar las 380.000 oportunidades que desde su arranque en 2013 «ha permitido la Estrategia de Emprendimiento y Empleo», y que se traducen en 120.000 jóvenes parados menores de 30 años y 300.000 mayores de 45.
Sumar, sumar y sumar
A pesar de que el ritmo de creación de empleo alcanza el 3,29 por ciento y del incremento de la ocupación que, en términos desestacionalizados, se viene produciendo en el mercado laboral durante los últimos 20 meses «aún queda mucho camino por recorrer porque hay más de 4,5 millones de españoles que aún no tienen un empleo y son nuestra absoluta prioridad», afirmaba Bañez. Pero para ello es necesario «sumar, sumar y sumar voluntades, las de los trabajadores y las de toda la sociedad española». Voluntades que apuntan a reforzar y avanzar en las políticas activas que permitan que seamos «capaces de competir como país con el talento, la innovación y el capital humano».
Lo cierto es que aunque la reforma estructural del mercado de trabajo «necesita un tiempo para que se consolide» desde el Gobierno se muestran optimistas con el cumplimiento del objetivo de 20 millones de ocupados en 2020, así como para la sostenibilidad del ritmo actual de creación de empleo, 5.000 diarios, eso sí todo dependerá de «si el crecimiento del PIB continúa siendo como hasta ahora», apostillaba la secretaria de Estado de Empleo Engracia Hidalgo, que clausuró el acto.