La danza es un arte capaz de comunicar sentimientos y emociones, un diálogo sin palabras que logra expresarlo todo a través de la combinación del movimiento con espacios, texturas y paisajes sonoros y escénicos. Esto es lo que consigue Roberto Olivan en cada una de sus interpretaciones, creaciones y proyectos culturales.

El bailarín y coreógrafo se ha consolidado una intensa carrera a nivel internacional en el sector de las artes contemporáneas, llevando su manifestación escénica sincera, reflexiva y cuestionadora a diversos países del mundo. Combinando su pasión por el arte del movimiento contemporáneo, el artista exalta lo mejor de la danza y el circo contemporáneo en Deltebre Dansa, festival del cual es fundador y director artístico

Trayectoria profesional del artista

La carrera de Roberto Olivan ha estado marcada por la interpretación de conceptos transportados a universos íntimos a partir de la creatividad genuina de sus propios intérpretes, donde ha dejado ver su tendencia por distinguir entre lo ya establecido y lo insurrecto. Como amante de los riesgos, Roberto crea en sus obras continuos reencuentros entre los estilos preestablecidos y el surgimiento de una nueva lógica usada para transgredir los límites.

Su formación como bailarín comenzó en el Institut del Teatre de Barcelona y en la escuela P.A.R.T.S. de Bruselas. Es precisamente en esta ciudad donde el artista consolidaría su trayectoria profesional. Fue bailarín en la prestigiosa compañía Rosas, dirigida por Anne Teresa De Keersmaeker; además, participó en importantes producciones dirigidas por los reconocidos creadores Robert Wilson, Tom Jansen y Josse de Pauw.

En el año 2001, Olivan fundó su propia compañía de danza y arte contemporáneo llamada ROPA /Roberto Olivan Performing Arts. Durante su carrera ha sido fundador de diversos proyectos que promueven el mundo de la danza y el circo contemporáneos. Entre ellos, el festival internacional Deltebre Dansa, celebrado anualmente desde 2004. A la vez, es impulsor y director del L’Obador Espacio de Creación, un centro diseñado para la creación contemporánea, donde artistas de todo el mundo realizan residencias artísticas.

También ha colaborado con compañías de danza, universidades, conservatorios y centros de danza en todo el mundo, compartiendo su método y parte de las experiencias que ha vivido a lo largo de su trayectoria. En los últimos años, el bailarín ha impartido clases y talleres alrededor del mundo, y se ha destacado como coreógrafo y bailarín para producciones cinematográficas, así como encargos y comisiones para otras compañías de talla internacional.

Reconocimientos que avalan la carrera de Roberto Olivan

Para un artista, obtener un reconocimiento por su labor es reconocer toda una trayectoria artística arropada por el empeño de muchas otras personas cercanas, que han aportado conocimientos, experiencia, talento y mucho esfuerzo.

En este sentido, Roberto Olivan goza del privilegio de haber recibido una multitud de premios que avalan la calidad de su trabajo.

Entre los galardones más destacados que le han sido otorgados se encuentran el EFFE Award 2019, que concede la Asociación Europea de festivales EFFE, al más innovador y abierto a la comunidad; la Mención especial en los Premios de la Crítica d’Arts Escèniques en 2020, obtenido por los 15 años del festival Deltebre Dansa; el Premi Nacional de Cultura de la Generalitat de Catalunya el 2014; el Premio Cultura Deltebre 2012 y 2017, así como el Premio FAD Sebastià Gasch d’Arts Parateatrals 2012, en Cataluña, entre otros premios y nominaciones a nivel internacional que consolidan a Roberto Olivan como un referente en el mundo de la danza y el arte contemporáneo.