Afecta principalmente a los trabajadores autónomos y a las pequeñas empresas

La morosidad ha bajado, sí, pero la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) advierte que también es consecuencia de la menor actividad económica. “Puede considerarse que éste no es resultado sólo de una mejora financiera, sino también del menor nivel de actividad económica y por lo tanto de transacciones comerciales”, explica César García, secretario Institucional de UPTA.

La organización valora que “esta evolución parece demostrar que mejora de forma sustancial el nivel de morosidad entre empresas y con ello se da un respiro en las dificultades de liquidez que venían sufriendo especialmente los autónomos”

Durante el mes de abril, se produjo un estancamiento en los pagos respecto a los datos registrados en el mes de marzo. García asegura que este descenso de la actividad económica “afecta de manera muy especial a los trabajadores autónomos y a las pequeñas empresas”.

Yasmina Pena