Hoy nos quedamos con Repsol, que ha ganado 832 millones de euros durante los nueve primeros meses del año, lo que supone un descenso del 49,5% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. Sus cuentas se han visto afectadas por la caída de un 50 por ciento de media del crudo en lo que va de año. El beneficio neto ajustado, se acerca a los 1.399 millones, un 5 por ciento más.

El área de upstream ha tenido un resultado recurrente negativo de 633 millones, por culpa del descenso de precios del crudo. Javier Barrio, responsable de ventas institucionales de BPI, cree que lo que no ha gustado a los inversores es precisamente que, tras la caída de precios del petróleo “los precios a los que se llevó a cabo la compra de Talisman se quedan un poco caros”, explica en Gestiona Radio.

Mientras, la parte de Downstream (la de refino) ha aumentado su neto ajustado un 158 por ciento hasta 1.655 millones, lo que ha compensado en parte los datos del negocio de producción.

Repsol mantiene no obstante su previsión de cerrar el ejercicio con un beneficio neto ajustado de entre 1.600 y 1.800 millones de euros.