Hoy elegimos a Bankia.
La entidad ha vendido tres carteras de crédito moroso por valor de 713 millones de euros. Esa desinversión, enmarcada en el plan de reestructuración de la entidad, se ha producido a través de un proceso competitivo de desinversión de activos no estratégicos en el que han participado, según la firma, los principales fondos de inversión y entidades especializadas en la compraventa de carteras de crédito.
Así, Bankia se ha desprendido de una subcartera de créditos en situación concursal y de dos subcarteras de créditos concedidos a pymes y particulares.