Vox ha propuesto en el Congreso de los Diputados que los trabajadores autónomos que con motivo de la pandemia de Covid-19 se han visto obligados a teletrabajar puedan deducirse fiscalmente gastos vinculados a su vivienda.
Y es que, tal y como exponen en una proposición no de ley registrada en el Congreso, a la que ha tenido acceso Europa Press, pese a que los autónomos tienen reconocido el derecho a deducirse determinados gastos, la Dirección General Tributaria ha rechazado esta posibilidad a partir de «una interpretación retorcida» de la normativa.
Concretamente, la Ley de medidas urgentes del trabajo autónomo de 2018 estableció la posibilidad de poder deducirse hasta el 30% en el IRPF de los suministros de electricidad, gas, agua, telefonía e Internet de la parte de vivienda que afecta a la actividad.
Sin embargo, esta aplicación se ve cerciorada al aceptar únicamente la citada Dirección General de Tributos esta desgravación en caso de contar con contadores separados, algo poco habitual, señalan.
Y, a raíz de la pandemia y la extensión del teletrabajo, Hacienda dictó una resolución que impedía esta desgravación para los autónomos que empezaran a trabajar a distancia.
Todo ello al considerar que, para que estos suministros puedan considerarse gastos deducibles, es necesario que la vivienda habitual se encuentre parcialmente afecta a la actividad, algo que no es así, ya que su utilización responde a una circunstancia ocasional y excepcional.
Sin embargo, Vox considera que se trata de una «interpretación retorcida» al argumentar que este elemento temporal no determina en ningún caso la condición de bien afecto a la actividad, pues su uso mismo es necesario para el desarrollo de la actividad.