Con la situación actual del mercado inmobiliario para cumplir el sueño de algunos de tener casa propia es necesario recurrir a créditos hipotecarios ofrecidos por diversas entidades financieras. Estos préstamos ayudan a conseguir una casa, un piso o incluso realizar reparaciones a la propiedad que ya se tiene siempre que se cumplan con unas condiciones que en ocasiones varían de acuerdo con la entidad bancaria que la ofrece.
Por lo anterior, es importante conocer el producto que se va a solicitar para cumplir con los requisitos exigidos y estar en capacidad de pago de las mensualidades. En este sentido casi todos los bancos tienen en su web simuladores de hipotecas donde puedes hacerte una idea de lo que pagarás mes a mes. Por ejemplo, con ING DIRECT puedes calcular tu hipoteca en esta página con unas sencillas preguntas y de modo muy intuitivo.»
Ahora bien, algunos de los requisitos solicitados por las entidades bancarias que ofrecen estos créditos son tener una cuenta de nómina o cuenta sin nómina para los clientes de la entidad donde se va a solicitar o en caso de no serlo abrir una. Como solo se puede solicitar el 80% del valor total en el que esta tasada la propiedad, las entidades exigen que además de la cuenta se tenga un ahorro o capital al menos del 20% del valor de tasación de la propiedad. Otros documentos que pueden ser requeridos al momento de la solicitud son el seguro de vida y hogar, los cuales influyen al momento de contratar la hipoteca ya que sin estos el valor suele aumentar.
Igualmente para conseguir el interés de +0,99% hay que domiciliar la nómina o realizar ingresos mensuales de 600 euros o mantener un saldo de 2.000 euros en la cuenta registrada.
Además, en ciertas entidades bancarias se puede contratar el Tipo Estable, con lo que se asegurará hasta 3 años el interés fijo en la Hipoteca de modo que no haya variaciones en la cuota mensual.
Por último, ciertas entidades ofrecen la solicitud de los créditos hipotecarios online de manera que las condiciones de vinculación son inferiores a las exigidas habitualmente.
