El consumo energético puede subir hasta un 7% por cada grado que aumentamos el termostato

Las puertas y las ventanas mal aisladas producen pérdidas energéticas del 20 por ciento

Las bajas temperaturas ya han hecho su aparición y los hogares españoles comienzan a prepararse para afrontar el invierno. Sin embargo, son pocas las personas que conocen el coste que puede llegar a generar aumentar la posición del termostato. Según las estimaciones de Danosa, por cada grado que se sube la temperatura en casa, el consumo de energía puede llegar a crecer hasta un siete por ciento, con el consiguiente encarecimiento de la factura.

Y es que pese a que existen distintas opciones para conseguir una casa más sostenible (como cambiar las bombillas), lo cierto es que el aislamiento tiene un papel fundamental.

En este sentido, un 98 por ciento de la energía que se produce en todo el mundo se llega a «gastar» debido a la ineficiencia. Es por ello que la falta de aislamiento en los edificios provoca una mayor necesidad de energía, lo que puede suponer un sobrecoste de hasta 400 euros por año y vivienda. Además, Danosa asegura que está demostrado que por cada euro que se invierte en el aislamiento del inmueble, se produce un retorno de unos siete euros gracias al ahorro de energía.

Los «peligros» en las viviendas

Una vivienda o un edificio tiene múltiples focos de salida de la energía. Uno de los más conflictivos son las puertas y ventanas, en las que se pueden producir pérdidas de hasta el 20 por ciento, según las previsiones de Danosa.

En un análisis de puntos de escape en una vivienda, la compañía ha detectado que por el tejado puede perderse hasta un 30 por ciento de la energía, un 25 por ciento por los muros y alrededor de un dos por ciento por el suelo. En este sentido, Danosa estima que con una pequeña mejora en el aislamiento se puede ahorrar hasta un 30 por ciento en calefacción.

Asun Infante