Las empresas y pymes españolas buscan nuevos mercados

El año pasado las ventas a Estados Unidos y China rozaron los 16.000 millones de euros con aumentos del 7,2 y  8,8 por ciento respectivamente

De sueño a tendencia y realidad. Los datos de comercio exterior a cierre de 2015 ha vuelto a poner de manifiesto la fortaleza del sector exportador de España. Las ventas de bienes a mercados exteriores se cifraron en 250.241,3 millones de euros, lo que supone un aumento del 4,3 por ciento y casi 10.000 millones más con respecto al mismo periodo de 2014.

Pese a la desaceleración de las economías emergentes y del frenazo en el crecimiento de la eurozona, el dato respalda la tendencia que el secretario de Estado de Comercio en funciones, Jaime García – Legaz, apuntaba ante los medios la pasada semana “las exportaciones españolas están siendo capaces de reaccionar”.

Progresión que ha sido posible en parte por la ganancia de competitividad favorecida por un IPC en negativo, y en parte por la rebeldía que ha llevado a las empresas españolas a explorar alternativas allende los mares. “Nuestro sector exterior está resistiendo buscando nuevos mercados como Estados Unidos, China y Australia, en los que, además, está teniendo mucho éxito”, elogiaba García – Legaz.

Tesis que queda respaldada por los registros. Las ventas a Estados Unidos se incrementaron un 7,2 por ciento con respecto a 2014, alcanzando los 11.410,9 millones de euros. Cifra que, según los analistas podrá verse incrementada en un 1,6 por ciento una vez firmado el Tratado de Libre Comercio entre la Unión Europea y Estados Unidos (TTIP).

Por su parte el mercado chino adquirió productos ‘hechos en España’ por valor de 4.438,5 millones de euros, un 8,8 por ciento más. Con respecto al total de exportaciones supusieron un 4,6 y un 1,8 por ciento sobre el total exportado.

No replegarse en China

Convertir las crisis en oportunidades. Esta es una de las recomendaciones que los expertos lanzan a las empresas españolas que estén o que quieran dar el salto a los mercados exteriores.

Pese al estancamiento de la economía China, que según las previsiones de enero recogidas en el World Economic Outlook elaborado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) crecerá a un ritmo del 6,3 por ciento este año -seis décimas menos que en 2015 (6,9 por ciento) y un punto menos que en 2014 (7,3 por ciento)- el economista Emilio Ontiveros es rotundo «si me preguntan si debemos replegar la internacionalización en China, la respuesta es no».

El también presidente de AFI (Analistas Financieros Internacionales), que participó el pasado 09 de febrero en el primer encuentro Jump para la Internacionalización, patrocinado por Crédito y Caución, DHL y Deutsche Bank, Iberinform y Sage, defendía su tesis sobre la base de la «muy favorable» de la demografía de los llamados emergentes, que cuentan con una población «cada vez más occidentalizada; cada vez más formada, con un mayor volumen de renta y orientada al consumo».

Veredicto que hacía extensivo a otros países como India, para la que el FMI vaticina crecimientos a ritmos del 7,5 por ciento en los dos próximos años (2 décimas superior al registrado en 2015), o Vietnam, sobre el que se prevén incrementos del 10 por ciento en el consumo.

Prueba de que, «conociendo y sabiendo gestionar los riesgos» estas regiones siguen siendo oportunidad, son las últimas cifras publicadas por el Ministerio de Economía y Competitividad. La evolución de nuestras exportaciones hacia estos mercados entre 2014 y 2015 superaron los 1.429 millones de euros.

A India llegaron productos marca España por valor de más de 1.128 millones de euros, un 11,46 por ciento más. En el caso de las importaciones también se incrementaron un 17,70 por ciento (hasta 3.096 millones de euros)

En el caso de Vietnam las ventas aumentaron un 23,98 por ciento, situándose en los 300.481,07 euros durante dicho periodo. Aunque el volumen de lo que importamos fue de más de 2.300 millones de euros, (7,36 por ciento).

Gráfico_Export_India_China_Vietnam

Tierra de promesas

Respecto a la situación de Latinoamerica, y centrándose más concretamente en Brasil, Ontiveros se mostró convencido de que «una vez de que resuelva sus asignaturas pendientes (Brasil) es una tierra de promesas, porque tiene un clima empresarial más que aceptable, está muy bien ubicado y con una evolución demográfica favorable».

Además del país que preside Dilma Rousseff, Chile, por su «seriedad», Colombia por su «evolución, habiendo sufrido sólo una recesión de un año» en su historia reciente y Perú por «mantener una estabilidad macro» son otros de los mercados atractivos para las inversiones españolas. En este sentido el economista y presidente de AFI destacó que la región, en general «tiene los mimbres para renovar ritmos de crecimiento en velocidad de crucero de entre el 3,5 y 4 por ciento, frente al 1- 2 por ciento de la Eurozona».

Junto al economista y presidente de AFI, en el encuentro -presentado por Arturo Criado, director de la revista Capital- participaron José Vilches, Marketing Global Category Director de Campofrío, que puso el acento en que «el impulso táctico» que han supuesto exportaciones debe completarse con nuevos avances en las inversiones Junto a él, el diplomático Inocencio Arias, que alertó sobre el euroescepticismo «la Unión Europea está sumida en una crisis de fe», ha afirmado. Riesgo al que se añade la «relación malsana» con Estados Unidos.

Punto éste en el que no faltaron críticas y bondades al TTIP. Críticas porque, en palabras de Emilio Ontiveros, «opacidad y el oscurantismo» en los procesos de negociación, así como por la «paradoja» que supone firmar «acuerdos regionales en un mundo de globalización». Bondades, porque «el proteccionismo es un enemigo del bienestar y todo lo que sea liberar de obstáculos al comercio es bueno», eso si siempre y cuando «no se reduzcan en exceso los estándares en alimentación».

Más regulares

Pese a que el total de empresas que exportaron el pasado año experimentó un ligero descenso del -0,2 por ciento reduciéndose el número hasta los 147.378 (467 menos), la buena noticia es que las exportadoras regulares se incrementó un 4,2 por ciento con respecto a 2014.

Así el total de empresas que vendieron fuera de nuestras fronteras durante cuatro años seguidos o más alcanzó los 47.782, de las cuales el 48,77 por ciento (23.306) lo hicieron por importe superior a 50.000 euros.

Incremento que se acompaña a su vez por el crecimiento del volumen total exportado que pasó de los 223.421 millones de euros de 2014 a los 233.692 millones de euros en 2015 (4,7 por ciento más).

Cifras que en palabras de García – Legaz, “dan consistencia a la base exportadora de cara a futuro”, y ponen en valor la efectividad de las políticas puestas en marcha por el Gobierno del PP con el objetivo de consolidar el sector exterior como motor de recuperación y mejora de la  competitividad de la economía española.