La brecha salarial con los cotizantes del Régimen General continúa al alza y asciende a 365 euros mensuales

Cada vez son más los trabajadores por cuenta propia que deciden retrasar su jubilación. Las causas son sencillas, la crisis económica y las bajas rentas que recibirán a partir de dicho momento. Para ilustrarlo, la pensión media de un autónomo ronda los 622 euros mientras que aquellos que trabajaron en el Régimen General reciben 987 euros, es decir, 365 euros más cada mes.

Son cifras que la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) elabora a partir de los datos publicados por la Administración de la Seguridad Social. La diferencia entre ambos es significativamente elevada, un comportamiento que se ha agravado desde los últimos años ya que en 2013 se situaba en los 348 euros. “Sigue aumentando la brecha entre los autónomos y el resto de pensionistas”, explica el secretario general de UPTA, Sebastián Reyna.

El colectivo de autónomos “sigue cotizando demasiado por debajo de sus ingresos reales”, manifiesta Reyna, y aboga a que lo hagan por sus ingresos reales, “para evitar que las diferencias se sigan agrandando a medida que pasan los años”.

A 1 de noviembre, el Ministerio de Empleo y Seguridad Social registró 1,9 millones autónomos jubilados, 2.190 más que en el mes de octubre. El saldo anual vuelve a números positivos aunque en los 10 primeros meses del año solo han decidido retirarse 3.461 autónomos, una cifra muy inferior a los 14.479 autónomos de 2014 o los 22.726 de 2013.

Reyna recuerda a los responsables de Empleo la necesidad de incentivar la difusión de los beneficios y mejorar las cotizaciones de los autónomos “para que el nivel de protección social de estos se incrementen en los próximos años”. Por otro lado, también pide que reconozcan la cotización del autónomo a tiempo parcial en los trabajos no habituales, una “fórmula que además permitirá ayudará a emerger sectores económicos y actividades profesionales no registradas”.

Yasmina Pena