Según la Comisión Europea, los paneles solares chinos llegan a Europa y se venden con una diferencia del 80% en el precio. Es decir, acusa a ese sector de realizar prácticas de dumping, es decir, de vender un producto por debajo de su coste. Según ha explicado el comisario europeo de Comercio, Karel de Gutch, los productores chinos se han hecho con un más de tres cuartas partes del mercado de los paneles solares en la Unión Europea.
Así, para forzar a una corrección al Gobierno chino, Bruselas ha impuesto unos aranceles del 11.8% hasta el mes de agosto. Si para el próximo 6 de agosto las cosas no han mejorado, estos aranceles podrían aumentar hasta el 47,6%.
Una iniciativa europea que no ha sentado nada bien al Gobierno del país asiático. De hecho, el primer ministro chino, Li Kequiang, ha advertido de que esta medida podría influir en las relaciones chino-europeas si no se resuelve de manera satisfactoria.
