Grecia funambulista

 

Los ministros de Finanzas de la zona del euro intentan desbloquear definitivamente el segundo rescate a Grecia, para evitar una quiebra inmediata del país y las consecuencias que eso supondría para el conjunto de la eurozona.

El montante asciende a unos 130.000 millones de euros y los líderes del continente se muestran desconfiados realmente de que el país heleno cumpla lo que promete.

El caso es que Atenas acaba de aprobar un tijeretazo de más de 3.000 millones de euros entre despidos, rebajas salariales y demás, lo que sigue provocando indignación y disturbios en sus calles.

Pese a todo, el Eurogrupo le ha impuesto más condiciones, como que los partidos griegos se comprometan con los ajustes gane quien gane las próximas elecciones, a la vez que reclaman al Gobierno de Lukas Papademos que detalle una partida de 325 millones que, al final, se repartirá entre un recorte del gasto y una rebaja adicional de pensiones.