El ministro de Economía vuelve a recurrir al argumento del tiempo para que la reforma laboral comience a dar sus frutos. Dice Luis de Guindos que todavía no funciona porque “está influenciada por una situación en la cual ha habido un arrastre desde el punto de vista del impacto en el empleo". Sin embargo, y una vez que se supere ese factor, De Guindos cree que se convertirá en una ayuda importante para impulsar el crecimiento: "se verá a medida que vayan pasando los meses que la mayor flexibilidad, que la moderación que se ha introducido en el comportamiento de los diferentes agentes, es positiva y va a ser una ayuda importante para la recuperación del crecimiento económico y el empleo en España", ha dicho.
De Guindos también lamenta que el cambio no se haya puesto en marcha en el 2011 ya que según sus cálculos, la destrucción de empleo privado hubiera se hubiera reducido a la mitad. Sobre los supuestos pagos en B en una de las empresas de Arturo Fernández, De Guindos prefiere ser prudente, no entra en detalles pero asegura que si el comportamiento es incorrecto el Ministerio de Empleo y la inspección fiscal actuarán. De Guindos añade que en España se están tomando todas las medidas necesarias para que las situaciones de corrupción no se repitan.
