«En Portugal estamos en pausa sin poder hacer planes de futuro»

Los nuevos recortes en el Estado del Bienestar plantedo por Passos Coelho no parecen haber sentado demasiado bien a la población portuguesa. Así, Marta Capela, periodista freelance en Portugal, asegura que "nos empieza a doler que todos los días salgo algún recorte más para nosotros". Eso sí, dice sentirse respaldados por el Tribunal Constitucional: "nos ha sabido bien que siga basta ya a los recortes a funcionarios, parados y pensionistas". Pese a todo ello, reconoce que si no se recorta sobre estos colectivos, los ajustes llegarán a los bolsillos de los trabajadores privados, algo que sería injusto: "funcionarios públicos y trabajadores privados tenemos diferentes protecciones, por lo que no somos equivalentes a nivel de recortes. Los funcionarios sabien que no les van a echar mientras que el resto pueden ser despedidos en cualquier momento", explica Capelas.

Esta periodista también apunta como en el país apenas ven alternativas políticas a la situación actual: "aunque todos los líderes de la oposición han criticado mucho la política de Passos Coelho desde hace dos años, no hay alternativa. Tenemos a la troika dentro, por lo que no se puede hacer nada muy diferente". Además, añadde que Seguro no ha dado muestras de tener la capacidad suficiente para gobernar.

Pesimismo en la sociedad lusa
Con todo ello, el pesimismo parece haberse instalado en el país. De hecho, Capela asegura que "el negativismo que existe ahora mismo en Portugal no se había visto nunca". Y es que, explica de manera dramática, como los ciudadanos lusos tienen la vida en pausa: "hasta que se termine la crisis seguiremos en pausa. No miramos hacia delante, hacia el futuro, porque con los recortes que vendrán no sabemos si en cinco años tendremos un plan de futuro, si podremos hacer algo diferente". Así, reconoce que ahora mismo el luso es un pueblo con gente negativa, triste y sin perspectivas de futuro.

Marta Capela ha explicado también como tras liberalizar el sector energético en Portugal, los precios de la luz no han bajado sino que aumentan. "Las eléctricas, quitandoi Iberdrola, dicen que probablemente de tres en tres meses aumentará el precio de la luz. Algo que no tiene sentido, porque la competencia no está funcionando. Alguien se está haciendo más rico y los de la clase media estamos pagando cada vez más". En esta línea asegura que la brecha entre ricos y pobres parece estar aumentando: "mientras que la gente que tiene mucho dinero sigue viviendo su vida sin problemas, ya hay niños que no tienen dinero para pagar el comedor en la escuela o mayores que mueren solos en sus casas". Una situación que no decir, dice Capelas, que se quiera culpabilizar a los ricos y que sean ellos los que tienen que pagar todo. Eso sí, alerta que "la red social se empieza a desmembrar, empezamos a mirar mucho para dentro desafortunadamente".