La marca personal

De nuestros protagonistas de hoy me quedo con su ilusión por la vida, la motivación, el afán de superación, la felicidad que irradian después de una tragedia. Sean cuales fueran sus circunstancias, sus objetivos en la vida, su papel dentro de la empresa, es gente que, independientemente de las circunstancias, problemas o dificultades, contagiarán entusiasmo. Una actitud de aceptar la vida tal y como viene, no desde el desánimo, sino desde la alegría y el empuje.  Ellos son lo que quieren ser.

Estuve en la vuelta a Zaragoza del Ciclón de Jerez (invitado por el periodista Álvaro Estallo, de lacaffe.es, entre otros), la plaza del percance, y he de reconocer, que tras veinte años viendo toros (y muchos), sólo verle salir al ruedo emocionaba. Como Paula cojeante en su homenaje de Madrid, o como Curro saliendo al tercio con su capotillo. Su sola presencia hacía estallar en aplausos.

Motivación, talento, iniciativa, calidad, internacionalización, liderazgo, marca, valor añadido,  resultados, beneficios… son términos aplicables al mundo empresarial, pero cada vez más al personal, al manejo de nuestra imagen, a la gestión del quién somos, cómo nos movemos, nos relacionamos y nos vendemos. Enseñanzas que en este mundo ultracompetitivo pero en crisis hay que poner en marcha, hacer tu propia estrategia, destacar y obtener el máximo beneficio. No sólo desde la tarjeta de visita y la labia, sino utilizando todas las herramientas que ahora a nivel comunicación nos ponen en bandeja las nuevas tecnologías. Su uso correcto y estudiado (las 5 W’s del periodismo tradicional nos vale para un primer análisis), nos ayudan a posicionarnos, a destacar y a ser más visibles y atractivos para conseguir nuestros objetivos. María y Juan José son un ejemplo de superación personal, pero que no han obviado la importancia de esta estrategia, hasta llegar al parche azul…
Parece que hayan seguido las lecciones de Tom Peters, quien hablaba del entrenamiento de las competencias de liderazgo necesarias para movilizar el potencial de las personas, el auto-descubrimiento y la edificación de las fortalezas interiores de un liderazgo consistente. Una clara  orientación a las capacidades.

Escuelas de negocios como el IESE o el CEU llevan tiempo diseñando y ofreciendo cursos y módulos sobre estos temas. En el caso del CEU está apostando muy fuerte y ha lanzado un programa este año.