El Gobierno de Australia expresó este jueves que está dispuesto a abastecer de gas natural a sus «aliados» europeos a precios «asequibles», en el caso de que Rusia decida cortar el abastecimiento de este recurso energético a los países de Europa a raíz de la crisis en Ucrania. «Tenemos gas y esto nos pone en una posición de fortaleza para apoyar a nuestros clientes y aliados», dijo en un rueda de prensa el ministro australiano de Energía, Angus Taylor, ante la posibilidad de que su país, uno de los mayores productores de gas natural licuado del mundo, le venda este hidrocarburo a Europa.
Por su lado, el titular de Recursos, Keith Pitt, quien compareció junto a Taylor aclaró que si bien Europa no ha realizado «un pedido formal» de suministro de gas, el Gobierno de Australia está dispuesto a vendérselo a precios «sensatos y asequibles». Pitt también remarcó que «la desestabilización» puede conllevar un impacto significativo en el precio del combustible y que ya se comienza a notar en la nación oceánica, donde el coste de este recurso ya indica un aumento.
La oferta de Australia se da después de que Estados Unidos comenzara esta semana conversaciones con sus aliados europeos para «identificar» alternativas al gas ruso en otras partes del mundo, como el norte de África u Oriente Medio. La tensión en Europa se ha elevado en las últimas semanas ante una posible invasión o incursión rusa en Ucrania, después de que Moscú movilizara a unos 100.000 soldados en la frontera ucraniana, por donde pasan sus gasoductos que abastecen de gas a los miembros del bloque de los Veintisiete, incluyendo España. El 41% del gas natural que se consume en la Unión Europea (UE) proviene de Rusia, país que también es su principal proveedor de crudo y combustibles fósiles, según datos de la Oficina Europea de Estadística (Eurostat).