El mercado de turismos y todoterrenos alemán cerró el mes de septiembre con unas matriculaciones de 265.227 vehículos, lo que supone un crecimiento del 8,4% en comparación con el mismo periodo de 2019, según datos de la Autoridad Federal del Transporte Motorizado de Alemania (KBA, por sus siglas en alemán).

Así, se entregaron en Alemania 120.645 automóviles de gasolina, un 17,6% menos, mientras que se vendieron 67.901 coches de diésel, un 6,4% menos. Sin embargo, se matricularon hasta 21.188 modelos eléctricos, un 260% más que en septiembre del ejercicio pasado, así como 54.036 coches híbridos, un 185,2% más.

Entre las marcas alemanas, Audi incrementó sus ventas un 42,4%, hasta 16.247 unidades, mientras que BMW y Mercedes-Benz crecieron un 1,9% cada una, con 20.267 unidades y 27.360 unidades, respectivamente. También Volkswagen aumentó sus matriculaciones un 1,6%, hasta 40.398 unidades, y situándose como la firma más vendida en Alemania.

El descenso más notable entre las marcas de origen germano lo registró Smart, con un 41,2% menos, hasta 1.661 unidades, seguida de Opel, con 13.388 unidades (-27,6%); de Porsche, con 2.016 unidades (-19,7%), y de Ford, con 18.696 unidades (-0,8%).

Por su parte, en septiembre se vendieron 18.509 motocicletas en Alemania, un 65% más, así como 574 autobuses, un 77,7% más, y 2.348 camiones, un 9,4% menos.

En lo que va de año el mercado automovilístico alemán contabilizó unas ventas de 2,04 millones de unidades, lo que supone un descenso del 25,5% en comparación con los tres primeros trimestres del ejercicio anterior.