Dice el relator de la ONU Pablo de Greiff que a España le sobra meapilismo político, y que ya nos vale con la Ley de Amnistía de 1977 y el mírame y no me toques de la investigación de los crímenes del franquismo. Vaya, que tenemos todavía más miedo de Franco que de ningún político vivo.
Yo le diría al señor De Greiff que gracias, pero que no. Que se ha quedado corto. Que en España lo que nos vendría de perlas no sería investigar a ‘Panchito Pantanos’, sino que directamente nos intervinieran los cascos azules, y no con palomas pintadas en los cascos sino con acero calado en las bayonetas. Así, pimpampum, lucecitas de colores y dejarnos irreconocibles hasta para la madre que nos trajo al mundo. En plan Irak con Estados Unidos, a lo Estado canalla. Cosidos a balazos con muertes inocentes de por medio, si hace falta. Pero algo que dé ejemplo.
De otra forma, por más pesado que se ponga el señor De Greiff con los crímenes franquistas, o el relator internacional que sea con los atentados al sentido común que nos gastamos una y otra vez, desde ponerle sueldo a la reina o tratar con deferencia a los imputados regios, hasta tener un Gobierno sospechoso de corrupción y culpable de mentir, o desahuciar a jueces que precisamente tienen más de ONU que de España de Tócame Roque, como digo, por más que nos digan que así no, con la fauna que tenemos vamos a seguir haciendo el ridículo. Salvo, claro, que nos intervengan.