La teleco alemana Deutsche Telekom se anotó un beneficio neto atribuido de 2.487 millones de euros en los nueve primeros meses del año, un 22,6% menos en comparación con el obtenido durante el mismo periodo del año anterior, según se desprende de las cuentas trimestrales publicadas por la compañía este jueves.

La facturación neta entre enero y septiembre fue de 73.377 millones de euros, un 24% más que en el mismo periodo del año pasado. De esa cifra, los ingresos por servicios crecieron un 21,5%, hasta 59.016 millones de euros, mientras que los procedentes de la venta de productos alcanzaron los 10.669 millones de euros, 18,5% más.

Por áreas geográficas, los ingresos procedentes de Estados Unidos se elevaron un 48,6% como consecuencia de la compra de Sprint, hasta 44.024 millones de euros, mientras que la cifra de negocios en Alemania alcanzó los 17.507 millones, un 0,1% más. En el resto de Europa, Deutsche Telekom ingresó 8.344 millones de euros, un 1,9% menos, al tiempo que la división de soluciones de sistemas se contrajo un 4,9%, hasta 3.095 millones.

La compra de bienes y servicios supuso un gasto de 31.307 millones de euros entre enero y septiembre, un 18% más, al tiempo que los costes de personal se elevaron un 13,2%, hasta 14.233 millones de euros. El resto de gastos operativos experimentó un alza del 48,4%, hasta 3.386 millones.

De esta forma, el resultado bruto de explotación (Ebitda) de Deutsche Telekom fue de 27.582 millones de euros hasta septiembre, un 34,7% más que en el mismo periodo del año pasado.

Únicamente en el tercer trimestre del año, el beneficio neto atribuido de la teleco alemana fue de 817 millones de euros, un 40,3% menos. La facturación entre julio y septiembre fue de 26.393 millones de euros, un 31,9% más.