El gasto en prestaciones por desempleo ascendió a 2.064,9 millones en junio, un 50,7% menos que hace un año

Los gastos totales en prestaciones por desempleo ascendieron a 2.064,9 millones de euros durante el mes de junio, cuantía que es un 50,7% inferior a la del mismo mes del año anterior, cuando comenzó a dispararse el gasto por los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) por la Covid-19.

Según los datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social publicados este martes, de los más de 2.000 millones de euros en prestaciones por desempleo un total de 427 correspondieron a los ERTE, la cifra más baja desde que comenzó la pandemia y cuyo récord se alcanzó en mayo del 2020.
El gasto medio mensual por beneficiario, sin incluir el subsidio agrario de Andalucía y Extremadura, fue de 1.082,1 euros, 16 euros más que en junio del pasado año (+1,5%) y la cuantía media bruta de la prestación contributiva percibida por beneficiario se situó en 852 euros, 48,9 euros euros más que hace un año (+6,1%).
Los beneficiarios existentes a final del mes fueron 1.957.244, con una disminución del 50,8% respecto a hace un año. La cobertura del sistema de protección por desempleo se situó en el 58,1%, lo que supone una disminución en la cobertura del 46,8% frente al 109,2% que llegó a alcanzar el indicador en junio del 2020 ante la menor afectación de los ERTE.
El número de solicitudes de prestaciones a nivel nacional ascendió a 1.455.287, lo que representa un 35,7% menos que hace un año. Las altas tramitadas fueron de 1.178.969 y representa a su vez una disminución del 54,8%. El plazo medio de reconocimiento se situó a su vez en 2,88 días, por encima de los 2,72 días de un año atrás (+6%).
Por su parte, el gasto de las prestaciones por desempleo de los beneficiarios extranjeros supuso 165,2 millones de euros, un 61,4% menos, y en relación con el gasto total de las prestaciones por desempleo representó el 8%.
El número de beneficiarios extranjeros ascendió en mayo, en concreto, a 227.107, cifra que supone una caída del 55,8% respecto a un año antes. El descenso es ligeramente superior en los beneficiarios procedentes de países no comunitarios (-55,8%) que en los del entorno comunitario (-55,7%).
En relación con el total de beneficiarios de prestaciones por desempleo, los beneficiarios extranjeros representaron el 11,6% y supusieron el 26,4% del total de demandantes de empleo extranjeros.