El nuevo Opel Astra incorpora iluminación Intelli-Lux LED Pixel Light

El nuevo Opel Astra, no solo se ha electrificado por primera vez, sino que también continúa ofreciendo tecnologías de vanguardia al segmento compacto, que los usuarios  solo conocían en automóviles de segmentos superiores. Uno de los puntos fuertes del coche, que combina un diseño emocionante con multitud de elementos de gran practicidad, es la última generación del sistema Intelli-Lux LED® Pixel Light adaptativo. El sistema, utilizado en los Opel Insignia y Grandland, es único en el segmento compacto y cuenta con 168 elementos LED, que están constantemente en acción, 84 por cada faro, lo que asegura que la salida de la luz, se adapte con precisión a las condiciones de conducción en cada momento sin deslumbrar a otros usuarios de la vía. Se trata de ingeniería de la más alta precisión, hecha en Alemania y accesible para todos.

Luz Premium en el segmento compacto

Los finos faros del nuevo Astra, equipan una matriz de tres filas que realiza todas las funciones:                                                                                                                                                                        En la zona más cercana, una larga fila de píxeles adapta continuamente el enfoque de la luz a cada situación en las curvas.                                                                                                                                             Otra fila de píxeles finamente definidos y con similar capacidad de reacción, garantizan un haz óptimo en el área donde se encuentran el brillo y la oscuridad.                                                                                        La función matricial, “corta” con precisión el haz de luz, para no molestar a los coches que vienen de frente y a los que nos preceden y, el resto de las áreas siguen completamente iluminadas, lo que significa que el conductor del Astra, siempre tiene a su disposición una luz que le permite conducir como si fuera de día, pero sin deslumbrar al resto del tráfico. De esta forma, el conductor identifica objetos tales como las señales de tráfico o animales al borde de la carretera, a una distancia que antes se encontraba en la oscuridad. Gracias a este sistema, los conductores pueden reaccionar más rápido y con antelación, y hacer una conducción más segura.