El sector privado de Estados Unidos creó 152.000 puestos de trabajo en mayo, según el informe publicado este miércoles por la consultora ADP, lo que supone una desaceleración respecto de los 188.000 nuevos empleos registrados en el mes de abril.
«El aumento del empleo y de los salarios se ralentiza de cara al segundo semestre del año. El mercado laboral es sólido, pero observamos focos de debilidad tanto en los productores como en los consumidores», ha valorado la economista jefe de ADP, Nela Richardson.
Los datos de la encuesta ADP han mostrado que la mayoría del crecimiento del empleo se achacó a los servicios, con 149.000 puestos netos. Los mayores incrementos se dieron en el sector del comercio, transporte y servicios básicos (55.000) y los servicios sanitarios y educativos (46.000).
Después, los bienes aportaron 3.000 empleos netos. La construcción creó 32.000, pero las manufactureras y las actividades extractivas destruyeron 20.000 y 9.000 puestos, respectivamente. En total, hubo 132,072 millones de ocupados en el sector privado.
El estudio ha apuntado a que el empleo se generó, en mayor medida, entre las grandes empresas (+500 trabajadores), con 98.000 empleos, seguida de las medianas (50-499), con 79.000. No obstante, las pequeñas empresas aligeraron plantillas en 10.000 personas.
De su lado, los salarios anuales avanzaron un 5% interanual por tercer mes consecutivo, con las microempresas de entre 1 y 19 empleados subiéndolos un 4,2%, y el resto de firmas revalorizando las nóminas en línea con la media.